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Una Dinamita de energía y pasión

María Ferreyra dice que a los 30 años quiere ser exitosa, pero a los 27 ya lo es. Nos recibió en el gimnasio Evita de Los Olmos y hablamos de su infancia, sus comienzos y su entrenamiento. "Si me sacan el boxeo, no sé qué haría", expresó

María, en el gimnasio en donde muchos chicos y chicas encuentran contención

María Ferreyra dice que a los 30 años quiere verse exitosa en el boxeo, deporte al que llegó para bajar de peso, y que se transformó en su cable a tierra.

Le faltan 3 años para los 30 y ya es exitosa. Viene de distintos triunfos en el ring, y se apresta a una carrera muy importante.

Recibió a Fibra en el gimnasio Evita de barrio Los Olmos en donde pasa buena parte de sus días. Junto con ella estuvieron su compañero, Federico, y su papá.

Es mamá de dos hijos (Mateo y Dylan), y parte de una familia numerosa de quince hermanos.

Hablamos mucho con ella. Acá les compartimos lo más destacado de lo que nos contó la Dinamita de la ciudad

 

La chica que fue. "Somos quince hermanos, la única que siguió por el lado del boxeo fui yo. Contando de abajo para arriba, soy la número cuatro. Desde muy chica siempre me gustaron las piñas. Fui muy rebelde en el colegio".

"Era muy conflictiva. No me importaba si era varón o nena. Eso hacía que la señorita de la escuela y las profes renegaran mucho conmigo".

 

Su barrio. "Nací en Tres Algarrobos, en Buenos Aires. En realidad, somos de acá, de Villa María. Mis viejos se fueron por trabajo, y a los seis meses de vida nos volvimos para Villa María.

Soy del barrio San Justo, pero digo que soy de Los Olmos porque llevo más tiempo viviendo acá".

 

El inicio. "Empecé en esto porque luego de dos embarazos seguidos estaba cerca de los 90 kilos. Siempre me había gustado el boxeo, pero nunca imaginé competir. Mi objetivo era aprender boxeo para adelgazar".

 

La escuelita. "Lo conozco a Fede en 2011. Justamente, ese año se había abierto esta escuela de boxeo. Él fue uno de los primeros boxeadores de acá, de la escuelita. Fue un proyecto comunitario de los vecinos. Tuve mis hijos y un día decidí empezar a practicar para adelgazar. Gabriela Ramos daba clases en Las Playas y con ella debuté en el boxeo".

 

Federico. "Es súper compañero, él es todo un amor. Somos muy diferentes, pero llevamos 13 años juntos y siempre ha estado ahí para apoyarme. Tenemos un buen diálogo, y dentro del gimnasio estoy bajo sus órdenes, después afuera vemos (risas)".

 

El apodo. "Dinamita me puso Fede, por esa misma razón, porque de una chispita exploto"

 

Autocontrol. "El boxeo me enseñó a controlar mis impulsos y actos. El boxeo es una disciplina muy completa. Ahora sé no responder enseguida, y me tomo las cosas con calma. Siempre digo que el boxeo es como mi cable a tierra, es algo muy importante en mi vida. Hoy en día, si me sacan el boxeo, no sé qué haría. Le dedico mucho tiempo".

 

La alimentación y las limitaciones. "Sabemos que el boxeo es un deporte que practican muchas personas de bajos recursos, como yo. No tengo la oportunidad de alimentarme al cien por ciento con una comida adecuada, ya que eso conlleva mucho dinero. Así que como variado. La nutricionista me enseñó que debemos comer variado y fuerte porque el boxeo lo demanda. Trato de comer sano, pero no me prohíbo cosas comunes como el pan o gaseosa".

 

Un ambiente con más varones. "Creo que los prejuicios siempre están, pero gracias a la visibilización de varias mujeres, hoy podemos llevar adelante el deporte. Este es un ambiente machista, y como mujer a veces es incómodo estar en un vestuario donde se desnudan".

 

Miedos enfrentados. "Los miedos siempre van a estar, pero me siento fuerte físicamente. Recién hablaba con mis cuñadas y me decían "¿No tenés miedo, María?". Mi enfrentamiento a esos miedos está en saber que estoy preparada para el combate. Sabemos a lo que nos arriesgamos al subir al ring, sabemos que un golpe mal dado nos puede ocasionar la muerte".

 

Gran familia para muchos chicos. "Estamos enfocados en el boxeo, pero también en que ellos sean campeones de la vida. Sabemos la problemática de consumo y las dificultades de vida que enfrenta cada uno. Tratamos de ser una familia. Vienen muchos pibes y pibas con muchas problemáticas, y tratamos de ser su hombro, su oído. Lo que necesitan y no encuentran en sus casas o en la vida, tratamos de serlo nosotros".

 

La necesidad de apoyo. "Necesitamos apoyo. En este deporte a veces nos preguntamos por qué no hay campeones mundiales en Argentina, y es por eso, porque falta apoyo para los boxeadores amateurs, para los pibes de barrio. Necesitamos que las autoridades que pueden ayudarnos lo hagan, que vengan a visitarnos y vean cómo trabajamos".

 

Lo que viene. El sábado 14 de septiembre se realizará una velada internacional de boxeo en el Salón de los Deportes, organizado por el municipio y la empresa OR Promotions.

 

María se enfrentará con la colombiana Johen Paola González, buscando un título sudamericano en la ciudad.

La velada será transmitida desde las 23 horas por la señal TyC Sports.

 

Diego Bengoa, Fibra